En una oportunidad estaba en una reunón familiar y llegó un señor muy serio y que es muy religioso. El tiene una hija como de diecisiete años. Una muchacha muy aplicada y formal. El nos confesó que el cuida mucho a su hija para que no se pierda en lo mundanal. Tanto asi que ellos no la mandan a la escuela, sino que estudia por la internet, para que no tenga mala asociación en la escuela.
También constantemente le están revisando lo que mira en la web. Por ejemplo, ellos entran de repente a su habitación y le dicen "agente seaport" y la jóven tiene que frizarse, quedarse tiesa mientras ellos le revisan la computadora y asi ver que estaba ella viendo en la computadora. Ellos dicen que han tomado esas medidas como una manera de protegerla de las cosas malas que andan en la red.
Cada quien tiene derecho a establecer sus propias normas en cuanto a la crianza de sus hijos, pero me parece que algunas cosas que ellos hacen son un poco extremistas. Por ejemplo ellos no están constantemente con ella. Esta muchacha bien puede aprovechar cuando sus padres están trabajando y ver lo que quiera en la computadora y luego borrar los sitios web que ha visitado. Eso para un jóven es muy fácil hacerlo.
Estoy muy de acuerdo de que debemos estar pendiente de lo que hacen los hijos, pero sin caer en los extremos. Algunos jóvenes cuando se controlan demasiado son como los resortes que cuando se sueltan nadie sabe en que dirección van a parar. Sé el caso de una hija de la hermana de mi esposa que vive en la Isla. Mi esposa llamaba a su hermana y esta le decía que su hija no salia de la biblioteca de la universidad estudiando. Según la madre, su hija salia desde la mañana a la universida y luego se quedaba en la biblioteca haciendo la tarea. ¡Su madre estaba muy orgullosa de tener una hija tan estudiosa e inteligente!
La madre no trabajaba para precisamente vigilarla y no la dejaba salir con nadie a ninguna parte. Y para resumir la historia, la muchacha como por obra de Dios salió en estado. Asi que las horas que ella supuestamente estaba en la biblioteca de la universidad, en realidad era con un enamorado que tenia a escondidas. La madre llamó a mi esposa llorando y preguntádose en que ella falló que su hija le hizo esa poca verguenza.
Creo que nuestros hijos jóvenes siempre estarán al acecho de cualquier tentación, sea de drogas o de sexo. Pero lo importante es entrenarlos y educarlos para que sepan cuidarse para cuando no estemos con ellos. Por ejemplo concientizarlos sobre el uso de las drogas y sus efectos y lo fácil de caer adictos a ellas.
Siempre el jóven tendrá la oportunidad de hacer lo indebido. Pero lo importante es que el muchacho no desee hacer lo malo. Si tiene el deseo buscará la oportunidad, porque la escuela le da el chance hacer lo que desea y nosotros no estamos ahí con ellos. La adolescencia es una edad muy difícil y peligrosa. Mi hija es muy aplicada en los estudios, pero no escupo para arriba, porque los adolescentes es como la lotto de New York:"Uno nunca sabe."
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